Con el paso del tiempo y todo lo que va pasando a nuestro alrededor, hay veces en las que no queda más remedio que rendirse a las evidencias y arrojar la toalla en ese famoso tema de tertulias, mentiras y leyendas que tengan que ver con Catalunya casi todo lo que se refiera a los Catalanes.
Y es una pena la verdad, pero bueno, es lo que hay y si uno lo tiene que admitir, pues lo admite.
Eso si, antes de la rendición final, que espero tarde en llegar, bien vale el esfuerzo de escribir lo que uno piensa. Aunque sea para mis propios ojos.
Una buena “pataleta” de esas que no sirven de absolutamente nada, pero que, por lo menos, desahogan que da gusto.
Y para quedarse uno bien descansadito, incluso merece la pena utilizar un lenguaje más coloquial y menos correcto que el que normalmente uso cuando me da por escribir.
Vivimos en un país, España, que tiene cómo una de sus especialidades, cargarse todo aquello que tiene, no alrededor, si no dentro de si mismo.
Nos empeñamos (todos) una y otra vez, en enviar a la mierda cualquier tipo de manifestación del otro que no nos guste.
Nos mola eso de faltarnos el respeto e insultarnos sin miramientos, y lo q es peor, sin antes asegurarnos ni tan siquiera si , por ejemplo, esa noticia de la prensa q nos hace reaccionar es verdad o no.
Y de casi todo esto, bajo mi punto de vista, hay 4 grandes culpables o responsables.
Primero nosotros mismos. Que además de culpables, somos los único que tenemos en nuestras manos revertir todo esto y evitar que acabemos a garrotazos en unos años.
De esto no tengo la menor duda. Esto acabará mal. Tardará décadas o siglos, pero acabará mal. Seguro.
Es por pura lógica, si plantas una mierda en el campo y te dedicas a removerla y a seguirte cagando en ella en lugar de enterrarla o dejar que “biodegrade”…….pues eso, que cada vez la mierda es más grande, huele peor y hay mas moscas asquerosas alrededor que se alegran y aprovechan de la situación. Moscas de mierda, por cierto.
Las moscas asquerosas entrarían, metafóricamente hablando, en el segundo grupo de culpable. Los políticos.
Esa raza de personajes que, lejos de estar en peligro de extinción, se multiplican, pero para mal. Cada vez salen bichos más raros, mas retrógrados, más agresivos, mas mentirosos y porque no decirlo, más asquerosos.
En este puñetero país, hemos pasado de los políticos de “profesión”, a los mercenarios.
Y son estos los que, por un puñado de votos, más mienten, falsean y enrarecen el ambiente. Se las trae floja que nos odiemos cómo precio.
En este santo país, hemos ido viendo como, a medida que pasaba el tiempo, estos politicuchos, eran cada vez peores. Ha habido de todo. Una extensa colección de personajillos de distintas alturas, tanto políticamente como en lo que se refiere a altura como persona.
Y perdonadme, pero como no dejamos de ser un rebaño de borreguillos, a los que saben muy bien por donde llevar, pues así nos va.
El tercer grupo se lo dedico a la prensa en general.
En prensa escrita tenemos esos grandes periódicos que mienten, y saben que mienten a diario.
En la radio, esos grandes programas que mienten, y saben que miente, a diario.
Y no lo digo solo en un sentido, si no en los dos. Pasa en todas partes.
Y para acabar, la tele. uf….la tele….. Que bonitos ese programas que podemos ver a diario. Que cultura!.
La caja tonta que le llaman. Bonito nombre que con el tiempo cada vez es menos cierta.
Y es menos cierto porque de tonta no tiene nada. Muchas de las cosas que se hacen y dicen son perfectamente estudiadas en algunos casos. Se sabe la reacción y es lo que se busca.
A partir de ahí, en cualquiera de los casos, ojalá que cada uno creyera lo que le diera la gana. Que opinase lo que le saliese de las narices y que actuara como le saliera de los cojones. Ojalá.
La realidad es que, en todos los sentidos, nos manipulan y se empeñan en tenernos en su rebaño particular.
Están o parecen estar decididos a que las famosas “dos Españas” sigan existiendo. Saben que eso les garantiza votos a uno y lectores y audiencia a los otros.
Y lo consiguen los muy mamones,eh? Vaya si lo consiguen.
Las dos “Españas están cada día más lejos, y eso es algo que no va a cambiar. Más bien al contrario.
Respecto al tema Catalán, me quedo con lo que siento y pienso:
Soy Español. Me siento orgulloso de serlo y ni he renegado ni lo haré jamás. De serlo en el más amplio sentido de la palabra y obviando a los que son más retrógrados y rancios. España es mi Pais. mi Nación, mi estado o lo que cada uno libremente quiera creer.
Pero que conste, que yo Tambien soy Catalán. Me siento orgulloso de serlo y también en el mas amplio sentido de su significado ( para mi ). Catalunya es mi País, mi Nación, mi Estado o lo que a mi me de la gana sentir. No soy independentista y no me gusta en ningún sentido la palabra nacionalista, más que nada porque a estas alturas la encuentro algo ridícula, pero si que soy y me considero Catalanista. En mi derecho estoy.
Que hay quien dirá: “es que Catalunya no es nada de eso, es solo una región”. Pues vale, es su opinión que respeto pero no comparto, yo yo tengo todo el derecho del mundo a sentir lo que me salga de los güevos. Faltaría mas.
Se me pueden dar lecciones de legalidad, pero jamás me va a poder decir nadie de donde me tengo que sentir porque eso sea una puta ley o lo que dicen un puñado de papeles que nos pasamos por el culo cada vez que nos interesa y al que nos agarramos cuando nos conviene.
Me siento como me siento y me encantaría que se me respetara. Por lo menos eso.
Igual que respeto al que se siente Español, Gallego ,Vallisoletano o de Villapelotas del Condado.
Tengo dos idiomas que voy a defender siempre.
Detesto las imposiciones sean en el sentido que sean.
Me dan asco las mentiras gratuitas a las que no me voy a acostumbrar nunca.
Detesto por igual la España rancia e intolerante que la Catalunya reaccionaria y victimista.
Y así podría seguir 3 dias.
Resumiendo. Intento ser libre de imposiciones y prejuicios.
Ah, y me dejaba el cuarto puesto en el ranking de culpabilidad :
El enano cabrón que destrozó este pais durante 40 años.
Ese tipejo que consiguió dividir a perpetuidad a todo un país y partirlo en dos a cuchillo….y nunca mejor dicho.
Ese monigote que impuso a un Rey al que por cierto respeto y valoro su importantísima labor en su momento, pero que en pleno 2011, no él, sino toda esa parafernalia, me empieza a sobrar.
Así que nada. Cada uno a su rollo y no paremos nunca de cagarnos los unos en los otros y de mentir para joder al resto. A esos que piensan diferente a nosotros.
Que todos tenemos razón, somos más guapos y la tenemos más grande que el otro.
Una pena, la verdad. Entristece ver como entre todos nos lo cargamos todo. Todo eso que nos debería hacer más ricos en todos los sentidos.
Ala.
Hasta otro rollo.